Padre José Kentenich
Un hombre elegido por Dios con un mensaje para nuestro tiempo.
Un apóstol de María.
El Padre y Fundador de nuestra comunidad y de toda la Familia de Schoenstatt.
Con él y como él vivimos la Alianza de Amor con María en el santuario.
Un reflejo de la paternidad de Dios. Nos guía, inspira y educa.
Convencidas de la santidad de nuestro Fundador, y del regalo que Dios quiere hacer a la Iglesia y al mundo a través de su carisma, damos a conocer su vida para que muchos se confíen a su intercesión.
Querida Madre, Reina y Victoriosa tres veces
Admirable de Schoenstatt:
Te agradecemos que nos hayas regalado en el Padre José Kentenich un reflejo de la bondad y misericordia del eterno Padre Dios.
Durante toda su vida, ese corazón paternal no tuvo otro anhelo que amarte y regalar amor a las personas que Tú le confiaste, ayudándolas eficazmente en todas sus dificultades. Con fe en la Divina Providencia, creemos que, desde la eternidad, continuará su misión de ser Padre y guía de los que confían en él.
Por eso te pedimos que te glorifiques a través de él y nos escuches en nuestras necesidades, hagas que se realicen milagros físicos y de transformación interior y nos concedas la gracia que confiadamente te pedimos.
Danos la conformidad con lo que Dios disponga y la salvación eterna.
Concede pronto al Padre Kentenich el honor de los altares para gloria del Dios Trino.
Amén.